Mejillones en escabeche

Hoy os traigo una receta rápida, sencilla y deliciosa, como me iba a olvidar de los deliciosos mejillones que tenemos en Cambados, si estamos plagados de bateas con mejillones y ostras de la mejor calidad!

Quiero dedicarle este post a mis amigos Inés y Moncho que trabajan en la depuradora Linamar de Cambados ya que además de ser trabajadores incansables son estupendos amigos y soportan de vez en cuando las pruebas de mis dulces ;) y como no, dedicarlo también a todos los marineros y mariscadoras de mi pueblo, por su duro trabajo y esfuerzo.

De este maravilloso molusco se podría hablar largo y tendido, ya que de todos es sabido la cantidad de nutrientes y vitaminas que poseen: 

"La abundancia de yodo que se puede encontrar en este alimento, es beneficiosa para nuestro metabolismo, regulando nuestro nivel de energía y el correcto funcionamiento de las células. Además, el yodo de los mejillones, ayuda a cuidarnos por dentro, regulando nuestro colesterol. Al ser un alimento rico en yodo, también ayuda a procesar los hidratos de carbono, fortalecer el cabello, la piel y las uñas.

Las mujeres embarazadas o los bebés en estado de lactancia, pueden beneficiarse de los efectos beneficiosos de este alimento ya que los mejillones tiene una alta cantidad de vitamina B12, también conocida como cobalamina. El consumo de este alimento también puede ayudar a personas con problemas estomacales gracias a su alta cantidad de vitamina B12.

Los mejillones tienen un bajo contenido en grasas totales y saturadas, pero este tipo de moluscos, son una de las fuentes más ricas en un ácido graso insaturado beneficioso para nuestro corazón. Este ácido es conocido colectivamente como ácido graso omega-3. En una ración de 85 gramos de mejillones cocinados al vapor, hay más de 700 mg de ácidos grasos omega-3. Los ácido grasos omega-3, especialmente los que provienen del pescado y del marisco, nos ofrecen beneficios cardioprotectores, disminuyendo el riesgo a desarrollar latidos cardiácos anormales y regulan los niveles de triglicéridos y en general, los niveles de grasa en la sangre. Ambos de estos beneficios contribuyen a una reducción del riesgo de ataque cardíaco o de muerte súbita por enfermedad cardiaca."

Calorías		72 kcal.
Grasa		1,96 g.
Colesterol		126 mg.
Sodio		296 mg.
Carbohidratos		3,40 g.
Fibra		0 g.
Azúcares		3,40 g.
Proteínas		10,18 g.
Vitamina A	54 ug.	Vitamina C	3,20 mg.
Vitamina B12	8 ug.	Calcio	80 mg.
Hierro	4,20 mg.	Vitamina B3	3 mg.

Fuente: http://alimentos.org.es/mejillones

Como tampoco quiero aburriros sobre el tema, me apetecía un montón mostraros una batea por dentro, en una ocasión, mi hermano que es buzo, me pertrechó con el traje de neopreno y me llevó de la mano a ver uno de estos impresionantes bichos! que aunque son preciosas verlas por toda la ría os aseguro que las cuerdas colgando plagadas de los deliciosos manjares que el mar nos agasaja,  es si cabe más maravilloso, tengo que pedirle un día que grabe un video para poder enseñároslo, seguro que os quedareis impresionados tanto como yo.

Estas fotos las he descargado de la red, pero si queréis saber más del tema y disfrutar de unas fotos maravillosas podéis visitar el siguiente blog: Objetivo marino

Y ahora sí os dejo la receta:

INGREDIENTES

2 kg de mejillones

1 vaso de agua - o de vino blanco

6 hojas de laurel

3-4 dientes de ajo

100 gr. de aceite de oliva

2 cucharadas de pimentón dulce

medio vaso de vinagre

PREPARACIÓN

Limpiamos bien los mejillones retirando las barbas y restos que puedan quedar en la concha, ponemos una olla al fuego con un chorro de agua, menos de medio vaso, también le podéis añadir en lugar de agua, vino blanco que les da un toque estupendo, también tres hojas de laurel. Así en frío añadimos los mejillones, ponemos al fuego hasta que comience a hervir y cuando veamos que ya están abiertos retiramos del fuego (máximo tres- cuatro minutos de hervor para que no se sequen) y dejamos enfriar un poco. Retiramos las conchas y vamos colocando las viandas en un bol.

**Consejo: podéis reservar unos cuantos mejillones junto con el agua de cocerlos (previamente colada) para haceros un delicioso arroz con extremo sabor a mar!!!!!

En otra cacerola ponemos el aceite de oliva junto con los dientes de ajo y las tres hojas de laurel restantes, dejamos que adquiera el ajo un tono doradito, retiramos la olla del fuego y dejamos enfriar un poco.

Añadimos el pimentón dulce mezclamos con una cuchara de palo y añadimos el vinagre poco a poco. 

Sólo nos queda verter la salsa encima de los mejillones y dejarlos reposar unas horas para que cojan todos los sabores.

Hacemos acopio de un buen trozo de pan y a disfrutarlos junto con una buena copa de Albariño!!! por cierto si os sobra alguno aguantan perfectamente un par de días en la nevera.